La mujer del sweater rojo es un retrato de Nina Terré, entrañable amiga del artista y de su esposa, Paule Cazenave, durante los años transcurridos en Rosario. En esta tela de grandes dimensiones, como en otras pinturas de la serie, la modelo aparece acodada y melancólica, ensimismada en pensamientos que parecen no tener fin.
El retrato es inmenso. Se ve una mujer envuelta en pensamientos. Un rostro suave iluminado sobre un fondo en penumbras. Está acodada en una mesa, su cabello tiene un ritmo lineal, es una melena corta típica de los años 30. Tiene las uñas pintadas y en una de sus manos, un anillo. Y viste un singular sweater que no escatima en detalles. Debajo y casi en un plano secundario, se ve que viste una pollera azul.
El aspecto monumental de la figura se contrapone al ensimismamiento y a la nostálgica expresión de la mirada, así como a la delicadeza de la pose. La estática exactitud del diseño, acentuada por una luz casi despiadada que se concentra en la mujer, la sumerge en un clima extraño, misterioso, deudor del arte metafísico de de Chirico y del surrealismo, introducido por el propio Berni en el país, en su exposición de 1932. El artista había abandonado esta tendencia para mostrar la crisis social y política que vivía la Argentina en esa década.
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