jugador de póker

23 gener 2018


El dibujo del humo por el aire
espeso como una invasión de niebla.
Cuatro hombres juegan, tercos, a la vida
sobre una mesa sucia de ceniza,
con las cartas marcadas de antemano.

Entienden el mundo como un apuesta,
como la rata ciega que devora
el corazón blanco de la fortuna.
Son, como los poetas,
los grandes artistas de la mentira,
arlequines de un teatro vacío,
corredores que tienen como meta
el esplendor leproso del abismo.

La vida
es jugárselo todo a una carta,
es intuir- en la mesa, en el poema-
las ruinas de la luz,
es ver en los ojos del enemigo
los símbolos de su derrota.

No tienen casa, mujer o esperanza,
no tienen hijos, ni voz, ya no cantan.
Sólo hablan al oído,
sólo juegan con cartas irreales,
sólo lo apuestan todo cuando mienten.

Autor: Bruno Mesa

Ilustración: Thomas Hart Benton, “Poker Night” (1948)